‘Nadie dijo que esto fuera fácil, sólo dijeron que intentarlo merecía la pena’ por Verónica Pérez

Verónica Pérez, Irene Pelayo y Laia Andreu | TWC
Hola a todos los lectores y seguidores de TheWangConnection. No os he escrito antes porque en Bulgaria teníamos muy poca zona wifi y aún estamos de viaje.
Aún no se explicarte lo que me pasó. Llegué a Borovets con el trabajo bien hecho y con muchas ganas de hacerlo bien. Estaba tranquila porque, aunque era un sitio con altitud, estos últimos entrenos los había hecho en altitud y sabía que podría afrontar la carrera, en ese aspecto, con tranquilidad.
Ahora bien, nada más dar la salida ya me costaba enlazar con el grupo de cabeza. La carrera transcurría por una pista de esquí y comenzábamos sobre una altitud de 1330 metros. El piso era duro y se podía correr y, a medida que íbamos subiendo, la carrera se iba endureciendo por sus empinadas rampas, aunque era un circuito que se podía hacer corriendo entero.
En el primer kilómetro el grupo de cabeza me sacaba unos metros y ya me costaba enlazar con ellas. En ese momento ya sabía que mis piernas no iban, que no sería mi día. A medida que iban pasando los kilómetros, mis piernas se iban encontrando peor, veía cómo las rivales me adelantaban y yo no podía aguantar el ritmo que iban imponiendo, así que tenía que coger mi ritmo sin preocuparme de las demás porque, de lo contrario, no llegaría a meta.
Desde ese momento el trabajo psicológico que tuvo que hacer mi cabeza fue enorme para poder hacer el circuito de 8’800 kms, hasta llegar a coronar la cima. Ya en la meta observaba cómo a la chica inglesa que había entrado delante de mí la tumbaban en una especie de carpas con esterillas para ponerle maravilla de oxígeno.
Por otra parte, era un circuito precioso con unas vistas espectaculares y tanto la organización del campeonato como la de la Federación Española estuvo a la altura en todo momento.
Me despido con una frase que me gusta muchísimo y que creo que hoy la necesito más que nunca: «Nadie dijo que esto fuera fácil, sólo dijeron que intentarlo merecía la pena».

Grupo de españoles participantes en Borovets | TWC